
¿Por qué el PIB industrial de Andalucía sigue estancado y no converge con España y Europa?- Los ingenieros demandan a la administración andaluza más ejecución y menos planificación en materia industrial

Los ingenieros realizan sus propuestas para que el sector contribuya más al PIB andaluz
A pesar de los avances de las tres últimas décadas, y de las políticas de apoyo a la promoción empresarial, el PIB industrial de Andalucía sigue estancado, sin converger con España y Europa. Un 25% por debajo de las regiones europeas con peso industrial. ¿Cuáles son las razones que tienen anclada a la comunidad en un pilar básico para el desarrollo económico?
Es la pregunta que se hacen la Asociación Superior de Ingeniería de Andalucía (ASIAN) y la asociación Más Industria, que reúnen a más de 14.000 ingenieros superiores de toda la comunidad autónoma y a empresarios, directivos y líderes de opinión de este ámbito. Y con el objetivo de hacer un diagnóstico de lo que está pasando y aplicar el tratamiento correspondiente, han elaborado dos documentos que han presentado conjuntamente a los medios de comunicación.
Tanto en el informe “La industria en Andalucía. Diez Temas en Diez años”, como el denominado “Documento de Antequera”, los ingenieros proponen una serie de iniciativas, medidas y acciones para revertir esta situación.
Razones estructurales
Para Aurelio Azaña, presidente de Más Industria, y José Belis, director del grupo consultor Arenal, encargado de elaborar el informe “La Industria de Andalucía”, la comunidad autónoma no ha avanzado en la última década en tejido industrial, “que sigue siendo muy escaso en términos relativos a su superficie y población, con “índices relativos de los más bajos de las regiones españolas”. De hecho, Azaña destaca que las regiones cuyo PIB industrial se sitúa en el 20% son “las más desarrolladas, las que anclan mejor el empleo de calidad”. Y la aportación del sector al PIB andaluz tan solo se sitúa en el 10%.
¿Qué es lo que está ocurriendo para que esto sea así? Lo destacamos en torno a cinco ejes fundamentales.
- Menos aportación al VAB: El informe presentado por los ingenieros recoge que la industria aporta menos al Valor Añadido Bruto (VAB) en Andalucía que en el resto de España (casi 4,8 puntos porcentuales menos en 2021), siendo la cuarta región española con menor contribución del sector, solo por delante de los dos archipiélagos y Madrid, y casi 20 puntos porcentuales menos que las regiones españolas más industrializadas.
- Dimensión empresarial: Una de las razones de esa menor aportación al VAB está relacionada con el tamaño de empresa. Las microempresas continúan siendo las más predominantes. Andalucía es la cuarta región española, remarca el informe, con menor presencia de empresas industriales grandes y medianas. De ahí que, pese a la gran creación de empresas de la última década, en torno a 3.000 de media anual, su mortalidad también sea muy elevada. De las empresas creadas en el periodo 2012-2019, en el primer año sobrevivieron el 79,2% y al quinto año seguían funcionando el 39,8%.
- Productividad: Otro factor que destacan los ingenieros es la concentración andaluza en actividades con bajo valor añadido, principalmente manufactureras, entre ellas agroindustria y extracción minera, en las primeras etapas de la cadena de valor. Algo que afecta a su capacidad productiva. La productividad de la industria andaluza se situó en 44,9 euros por hora trabajada en 2021, un 9,6% menos que la industria española, siendo la quinta región con menor productividad. De tal manera, que ha caído en términos reales en la última década, a diferencia de lo que ocurrió en el conjunto nacional. En términos nominales los crecimientos han sido del 3,3% y del 21,1% respectivamente entre 2012 y 2021.
- Innovación: Como consecuencia de los puntos anteriores, los ingenieros ven una “baja propensión de las empresas industriales andaluza a realizar innovaciones tecnológicas”. En torno al 2,6% de las empresas lo hicieron en los últimos años, del orden de un tercio menos que en la industria española. Una parte de las innovaciones que realizan las empresas consiste en la digitalización de sus procesos. Materia en la que la industria andaluza ha avanzado en los últimos años, aunque sigue existiendo margen de mejora. De hecho el Índice de Digitalización de las Industrias Regionales alcanzó un valor de 34,9 en Andalucía. El más bajo de las regiones españolas, 4,7 puntos porcentuales menos que la media y 9 puntos por debajo de las regiones que lideran el ranking, País Vasco y La Rioja.
- Rendimiento económico: Y para cerrar el círculo, Andalucía es la segunda región de España con menor rendimiento económico con respecto a la producción, muy lejos de las comunidades con mayor rendimiento. Todo ello pese a que la industria en la comunidad autónoma ha creado mucho empleo. Casi 60.000, alrededor de una cuarta parte del empleo existente hace 10 años, ritmo que casi dobla al del conjunto de la industria española.
El protagonismo que merecen
Ante este escenario, el presidente de ASIAN, Fernando Yllescas, pide a la administración andaluza que actúe, que pase a la acción y no tanto a la reflexión, ya que “Andalucía puede convertirse en la puerta industrial de Europa”.
Los ingenieros sostienen que la administración no puede perderse en constantes planes estratégicos que después no se ejecutan, y que paralizan las inversiones. Es más, aseguran que la nueva Agencia Andalucía Trade se encuentra en la actualidad totalmente “paralizada”.
Así, que proponen que se les tengan más en cuenta y consideración, con la finalidad de que la administración andaluza atienda a sus argumentos y propuestas que con el objetivo de contribuir “al desarrollo económico, industrial y empresarial de Andalucía”.
Yllescas explica que “somos los que realmente conocemos el sector, al que tomamos el pulso diariamente. Esta es la voz de los profesionales, la ingeniería y la industria donde se aglutina el talento de profesionales que conocen el tejido industrial y económico de la región y que aportan soluciones al día a día”.
Y resalta, al igual que el informe “La Industria de Andalucía. Diez temas en diez años”, que hay que aprovechar el talento humano del sector y la labor que están haciendo universidades y escuelas de ingenieros. Puesto que el proceso de tecnificación de la industria andaluza ha provocado que en la actualidad una elevada proporción de los empleos sean cualificados y que las ocupaciones elementales se hayan reducido notablemente (en 2022 representaron el 9,3% del empleo). Lo que ha llevado que algo más de un tercio de las personas que trabajan en la industria andaluza tenga educación superior.