
El 61% de la población andaluza mantiene como prioridad la lucha contra el cambio climático- Así se desprende de las conclusiones del cuarto estudio del Observatorio de Transición Justa expuesto en Sevilla

moeve cambio climatico
El Observatorio de Transición Justa (OTJ) ha presentado los resultados autonómicos de su cuarto estudio sobre la percepción ciudadana ante la transición ecológica, con un enfoque especial en Andalucía.
Impulsado por Fundación Moeve y Red2Red, el estudio ofrece un “diagnóstico riguroso” sobre cómo se perciben los retos climáticos desde la realidad social de este territorio. El 61% de la población andaluza considera que combatir el cambio climático debe ser prioritario. Aunque sigue siendo una mayoría, supone una caída de 8 puntos respecto a 2022. El 78,4% afirma creer con total seguridad en el cambio climático, frente al 85,5% de hace tres años. Las brechas de género se acentúan: las mujeres muestran mayor preocupación y certeza que los hombres.
La transición ecológica es cada vez más conocida: el 46% dice comprender el término. A nivel de beneficios, el 70% cree que puede reducir la contaminación y el 64% mejorar la salud. Por primera vez, predominan las emociones positivas: esperanza (25%), interés (23%) y responsabilidad (17%), superando a la desconfianza o la impotencia.
Impacto socioeconómico y gobernanza
Además, el estudio también se detiene en analizar las posiciones ciudadanas sobre las oportunidades económicas y sociales. De tal manera que el 51% cree que la transición generará empleo, aunque el 41% teme que también implique pérdidas laborales. Mientras que el 22% de personas ocupadas cree que su empleo puede verse afectado.
Si bien, un 48% anticipa posibles tensiones sociales, Andalucía muestra una mayor demanda de participación ciudadana (55%) que la media nacional.
El 67% recicla habitualmente, aunque otras prácticas sostenibles no superan el 30%. El uso del coche privado sigue siendo mayoritario (52%), y la presencia de coches eléctricos es aún baja (3%). Aun así, su percepción como alternativa ecológica crece (58%), pese a barreras como precio, autonomía y puntos de recarga.
En relación con la percepción de las políticas púbicas, el 81% apoya facilitar proyectos ecológicos; un 79% valora motivar a empresas sostenibles. Sin embargo, solo 39% respalda los impuestos ambientales.
El estudio del Observatorio de Transición Justa Tres examina tres perfiles sociales ante la transición. De una parte los comprometidos (49%) que cataloga como con conciencia alta y disposición a actuar. De otra, los escépticos (37%) apoyo condicionado a no asumir costes; y, por último, los inmovilistas (14%), que muestran un mayor rechazo y baja implicación.
Anabel Suso, coordinadora del informe y directora de Innovación de Políticas Públicas de Red2Red, ha señalado que “este estudio en Andalucía refleja una sociedad que, aunque mantiene un alto nivel de conciencia climática, muestra señales de desafección que debemos atender. La percepción de que la transición puede ser una oportunidad está presente, pero solo si es justa, cercana y adaptada a las condiciones reales de la ciudadanía.”
Por su parte, Teresa Mañueco, directora de Fundación Moeve, ha destacado: “Andalucía ofrece un escenario lleno de posibilidades para avanzar hacia una transición ecológica justa. Este informe nos ayuda a entender mejor cómo se sienten las personas ante estos cambios y qué barreras debemos derribar para que nadie se quede atrás en el camino hacia un futuro más sostenible.”
Este informe destaca la necesidad de adaptar las políticas climáticas a las realidades locales. En Andalucía, la transición se percibe como una oportunidad especialmente en términos de empleo y salud, “aunque es necesario aumentar la información, participación y justicia social para reforzar su legitimidad”, sostienen sus impulsores.
La encuesta se realizó entre febrero y marzo de 2025 a 3.280 personas en toda España y 579 en Andalucía, con cuotas por edad, sexo, hábitat y comunidad autónoma. Esta edición incorpora un nuevo módulo sobre movilidad y percepción del coche eléctrico, junto a los bloques habituales de conocimiento, actitudes, valoración y perfiles ciudadanos.