Manuel Fuentes: “El Camino es la actividad más rica para hallar gente diversa”
Entrevista al Comisario de los Caminos de Santiago de Castilla y León, Manuel Fuentes.
M. Martínez I maria.martinez@mercados21.es I 16.04.2012
Manuel Fuentes posa en el Monasterio de Prado de Valladolid, sede de la consejería de Cultura y Turismo, donde tiene su despacho.
Llegó al Comisariado de los caminos a Santiago de la Junta tras haber pasado por los gabinetes de todos los presidentes que ha tenido Castilla y León en democracia y lo hizo con la misión de impulsar una institución que, en ese momento, reconoce, partía de un hecho diferencial importante, ya que la Administración autonómica realizó un plan estratégico sobre todas la rutas jacobeas que transitan por la región. Desde entonces, y atendiendo al encargo del presidente, Juan Vicente Herrera, coordina a las administraciones implicadas en el camino, itinerario cultural en el que la que la sociedad civil es muy activa, máxime en la Comunidad Autónoma con más kilómetros de estos ramales en España.
¿Cuál es su función como comisario?
Nuestro trabajo consiste en mantener el recurso, es decir, que se pueda discurrir por los caminos, que exista señalización, que el estado físico de los trayectos sea tal que el transitar del peregrino se desarrolle con la mayor normalidad posible… Eso sí, teniendo siempre presente que los caminos a Santiago son una aventura desde que se empiezan hasta que se terminan y que existen algunas dificultades, en especial en función de las temporadas y de los territorios. Además, promovemos convenios con asociaciones civiles que organizan iniciativas a través de la sociedad pública de Turismo, Sotur. Ellos proponen acciones y nosotros las analizamos de cara a su promoción y difusión.
¿Y qué nos puede adelantar del próximo programa de actividades?
El siguiente año jubilar está muy lejos, pues será 2021, de modo que lo que estamos haciendo ahora es potenciar las actividades se organizan durante todo el año impulsadas por esas asociaciones y las celebraciones que tienen mucho arraigo en los ayuntamientos. En esta etapa de mantenimiento, lo esencial es eso. Este año, además, muchas asociaciones celebran su 25 cumpleaños, sobre todo las del Camino Francés, y de acuerdo con su impulso y sus estrategias se van a desarrollar acciones especiales. Contamos además con el programa Árboles en el Camino, que consiste en la repoblación de arbolado y estamos precisamente ahora en periodo de evaluar los resultados de esas plantaciones que lleva a cabo la Fundación Patrimonio Natural de Castilla y León. También, hemos abordado los impactos de las carreteras en los caminos, algo de especial importancia máxime hoy en día por las vías de alta velocidad y las autovías en desarrollo. En todos estos casos, sugerimos y cooperamos, no imponemos, sino que se trabaja de forma conjunta. Ah, y realizamos revisiones a todos los albergues.
¿Está prevista la apertura de nuevos?
En algunos lugares, sí, en los caminos más recientes hay permanente promoción de centros que, después, gestiona la iniciativa privada, que llega a disponer del 90% de estos recursos en Castilla y León y eso es lo que permite dotar a los municipios del entorno de un tejido económico que valoran mucho.
¿Cómo ha sido la evolución en cantidad y calidad del peregrino? Por sus características, la ruta puede ser un buen destino turístico durante la crisis…
El peregrino es el alma de un recurso que permite que él mismo promueva en su entorno otro tipo de visita que es la puramente turística y que es un valor en alza, en especial en el Camino Francés. Yo lo veo en positivo, no como contraposición a otros productos turísticos; el turismo de interior ha sido siempre nuestra bandera. Y a veces el año anterior y el posterior al jacobeo hay más visitantes, más peregrinos y movimiento económico que el propio año jubilar porque muchas personas piensan en la saturación de ese momento. No hay que olvidar que no existe ninguna actividad, ni económica ni de otro orden, en Castilla y León, que ofrezca la oportunidad de recibir y circular por tantos kilómetros a gente de tan diversas nacionalidades. Eso es de una riqueza enorme. Es un punto de enganche y difusión y un reto en el sentido de transmitir una buena imagen que sólo da beneficios y, en la grandísima mayoría de los casos, es producto de la iniciativa privada y de la sensibilidad de las pequeñas poblaciones.
¿Dónde habría que incidir en estos momentos?
Lo más importante ahora es lo que siempre ha dicho el presidente Herrera: mejorar para que, a ser posible, el peregrino no pise carretera. Es nuestro primer objetivo. Hemos de comprobar que cada obra que hace el Estado, la Comunidad, las Diputaciones, las Cámaras Agrarias… no afecte a la ruta y damos alternativas si hay posibilidad a ese discurrir. En segundo lugar, hay que preocuparse de que haya siempre lugares de acogida para atender a los caminantes. Otro tema muy singular y especial es el impacto que ha supuesto el Camino Francés en ciudades como Burgos y León y la Vía de la Plata en Salamanca. Ahí hemos estado muy cerca de las corporaciones locales y de las Diputaciones Provinciales para que el peregrino sufra lo menos posible, sobre todo en circunvalaciones de entrada, donde es básica una buena señalización interior y hemos mejorado mucho en esto en la Comunidad.
¿Cómo está afectando la actual situación económica a los patrocinios?
Hace poco hemos puesto sobre la mesa que al menos en el Camino Francés los patrocinios no se limiten a la singularidad del año jacobeo y es importante resaltar el salto cualitativo que supuso 2010, con una actitud de colaboración en mi opinión muy buena y con Comunidades Autónomas de todo signo político que llegamos a un acuerdo que sorprendió: usar en todos los sitios el nombre Xacobeo. La disposición a la colaboración tiene que venir, como es lógico, desde las empresas y en Castilla y León y en 2010 hubo importantes patrocinios. Habría que mantenerlos otros años y no sólo el jubilar, pero es algo que se ha de propiciar desde la Administración para extender o garantizar beneficios fiscales.
¿Cuál es su estrategia de promoción en internet, redes sociales…?
Es una faceta en la que estamos incidiendo pero en la que hemos de profundizar más. Hay que mejorar mucho en ese campo, hay buenas iniciativas privadas, pero la Administración ha de ser más dinámica en esto. Y en lo que es promoción clásica, se hace sobre todo gracias a Turespaña, que tiene un convenio con todas las regiones jacobeas con planes anuales. Es un escaparate de primer orden para muchos países… Y el hecho de que hoy, cualquier incidente, por ejemplo, proyectado en el mundo virtual, llegue a todo el mundo, te obliga a mucho.
Defiende que la ‘compostela’ no se limite a los últimos kilómetros en Galicia…
Que con 100 kilómetros la puedas recibir al final… Creo que debería haber alternativas que no concentraran en ese punto tantas personas por esa circunstancia con la presión, entre otros aspectos, medioambiental, que supone.
