Una amplia radiografía de las necesidades de financiación de la empresa andaluza- IV Informe "Financiación de pymes y autónomos en Andalucía" promovido por la SGR andaluza Garántia
Las empresas andaluzas, en particular las pymes, micropymes y autónomos, aún no se han recuperado de los efectos adversos de la pandemia. En especial, de sus necesidades de financiación, puesto que estas siguen siendo altas con respecto a 2019.
En concreto, el 56,3% de las pymes de Andalucía ha tenido necesidades de financiación, independientemente de si la buscó de forma activa o no, un porcentaje que supera en 17,5 puntos porcentuales al último dato prepandemia de la serie histórica.
Además, entre las pymes con más de 10 empleados el porcentaje con necesidades de financiación se eleva hasta el 81,8%. Así se desprende de los resultados del “IV Informe sobre la situación de las pymes andaluzas en relación con la financiación ajena”, presentado hoy por Garántia, Sociedad de Garantía Recíproca de Andalucía, en el que se analiza las necesidades de financiación de distintos sectores en 2022, a partir de una encuesta a más de 1.000 empresas andaluzas con plantillas de hasta 250 empleados.
Exportación e innovación
Además de la mayor financiación que requieren las pymes, el informe destaca también a aquellas empresas exportadoras o que apuestan por procesos de innovación. Así el 75,0% de las pymes exportadoras ha tenido necesidades de financiación en 2022 frente al 54,7% de las no exportadoras. En el caso de las pymes innovadoras, el porcentaje se eleva hasta el 72,2% frente al 54,3% de las que no innovan.
Por sectores, el ranking con una necesidad de financiación superior a la media es transporte y correos, construcción, agricultura, ganadería, silvicultura y pesca, comercio, talleres y servicios personales y la Industria manufacturera, energía y agua.
En 2022 el porcentaje de empresas que declara haber tenido obstáculos en su financiación se ha incrementado hasta el 54,8% desde el 31.7% en 2021.
El coste de la financiación, debido a la subida de los tipos de interés, se ha convertido en el principal obstáculo de las pymes con necesidades de financiación (el 31,6% señala que éste es una de las principales trabas encontradas en la búsqueda de la misma, frente al 9,3% en el año 2021).
La falta de garantías (personales, avales, etc.), sigue siendo elevada para las pymes, 19,8%, aumentando ligeramente respecto a 2021 (17,1%). Crece también la incomprensión de los negocios que piden financiación, “las entidades financieras no comprenden mi negocio”, (del 4,2% en 2021 al 11,1% en 2022) y la falta de financiación disponible en el mercado financiero (del 2,9% al 7,6%).
El recurso de las pymes andaluzas a la financiación bancaria sigue siendo mayoritario, pero la financiación ajena no bancaria ha seguido aumentando con fuerza en 2022.
El 87,8% de las pymes andaluzas con necesidades de financiación en 2022 utilizó financiación ajena para resolverlas y el 65,3% recurrió a financiación bancaria que se redujo casi 11 puntos porcentuales respecto al año anterior.
Por el contrario, se observa un importante aumento en el recurso a la financiación ajena no bancaria, que se ha situado en el 36,9% (frente al 20,7% en 2021). Por otro lado, se aprecia también un fuerte aumento del peso de los fondos propios en la estructura de financiación de las pymes andaluzas a través del patrimonio neto y de la reinversión de beneficios. Lo que habla de la prudencia de las empresas frente al panorama económico y geopolítico actual, y sus incertidumbres.
Inversión productiva y circulante
La financiación del circulante continúa siendo el principal destino de los créditos que piden las pymes, pero se ha reducido su importancia respecto al último año (73,3% frente al 78,2% en 2021). Le sigue en importancia la inversión en equipo productivo, que originó las necesidades de financiación en el 25,5% de las pymes andaluzas y que ha aumentado dos puntos porcentuales respecto a 2021, y la inversión en inmuebles (13,6%).
La financiación para inversión productiva de las empresas andaluzas crece dos puntos porcentuales con respecto a 2021 y si sitúa en el 25,5% de las pymes con necesidades financieras
En 2022, los procesos relacionados con la digitalización son los que más necesidades de financiación han generado en las pymes (11,3% del total de pymes); seguidos de la eficiencia energética (4,6%), la economía circular (4,5%) y del autoconsumo energético (3,7%). A corto y medio plazo, las pymes andaluzas prevén que las mayores necesidades se encontrarán vinculadas a la digitalización (18,6%) y el autoconsumo energético (9,8%).
Las garantías continúan siendo claves en el acceso a la financiación bancaria de las pymes andaluzas, y se le han solicitado al 38,2% de las pymes que han obtenido este tipo de financiación.
El 20,3% de las pymes andaluzas tuvo necesidad de presentar garantías o avales en el año 2022, una cifra muy similar a la de 2021. El endurecimiento de las condiciones de la financiación bancaria y la recuperación de los niveles de actividad mantienen la necesidad de garantías técnicas y financieras en niveles relativamente elevados (en 2019 este indicador se situó en el 15,8% de las pymes).
Perspectivas de crecimiento
Según este IV Informe “Financiación de pymes y autónomos en Andalucía”, en 2022 hay más empresas que están en proceso de recuperación económica y financiera y se reducen las que están peor que hace un año, pero aumenta el número de empresas vulnerables.
El informe destaca que un 19,6% de las pymes andaluzas está en situación de recuperación tanto económica como financiera, es decir, con crecimiento de la facturación y los beneficios y reducción de las ratios relacionadas con los gastos financieros y el endeudamiento.
Un 11,7% adicional son pymes en recuperación económica, reportan mejoras en facturación y/o beneficios, pero su situación financiera no evoluciona aún tan positivamente. Un 38,3% de las pymes están en una situación estable respecto a su situación hace doce meses, tanto a nivel económico como financiero. Un 24,9% del total de pymes señala una situación peor que la de hace un año.
En cuanto a las perspectivas de crecimiento, el 39,9% de las empresas espera que su facturación aumente en los próximos doce meses (45,4% en enero 2022 y 37,1% en 2020), aunque el porcentaje de las que cree que este crecimiento será importante es del 5,5%. Asimismo, se mantiene el porcentaje de pymes que consideran que permanecerán estables (40,0%) y aumentan el de las empresas que creen que su facturación va a decrecer (del 15,7% al 18,7%).
Uno de los datos más notables del informe es el que apunta que el tamaño medio de las pymes andaluzas ha descendido. Lo que es un indicativo claro de que los efectos de la Covid19 no se han superado en sectores claves para la economía andaluza. Tal y como lo ha subrayado el presidente de Garántia, Javier González de Lara, durante la presentación del informe.
“Hemos perdido músculo con la pandemia, ya que durante esos meses tuvieron que cerrar los establecimientos del sector servicios y turístico. Aunque la situación actual es compleja, esperemos que nos vayamos recuperando. De ahí la importancia por seguir apostando por la densidad, la dimensión y la diversificación de la empresa andaluza”, ha apostillado.
La presentación del informe también ha contado con la participación del director general de la SGR, Antonio Vega, y Maribel Martínez, directora de Abay Analistas Económicos, empresa que colabora en su realización.
El director de Garántia ha destacado los principales datos y ratios de la Sociedad de Garantía Recíproca y ha incidido en que pymes que dicen conocer los servicios de las SGR, el 89,1% señala que sus servicios ayudan a mejorar el acceso a la financiación bancaria; el 86,9%, que permiten obtener un asesoramiento adecuado; el 80,0%, que ayudan a obtener mayores importes en la financiación bancaria; el 72,8%, que favorecen la ampliación de los plazos de devolución de la financiación; y, por último, el 60,6% cree que las SGR permiten reducir los costes de la financiación bancaria.