“En los procesos de transformación digital lo importante no es tanto la tecnología, como conocer bien la situación de nuestra empresa y cuáles son las palancas de mejora y desarrollo”- Lo remarca uno de los Project Leader de referencia en este tipo de procesos del Kaizen Institute, Fernando Urbano
La transformación digital va mucho más allá de la propia tecnología. Así lo destaca uno de los expertos de referencia del Kaizen Institute, el ingeniero Fernando Urbano Soto.
Aprovechamos su participación en la Jornada “Gestión del cambio para la digitalización y herramientas clave en el sector de la construcción” que se celebra mañana, organizada por el Clúster de la Construcción de Extremadura y la Fundación Pymecon, para hablar sobre cómo se llevan a cabo estos procesos en las pymes.
De qué hablamos, cuando hablamos de transformación digital.
Cuando nos referimos a la transformación digital hay que abrir la perspectiva y no enfocarnos solo en las tecnologías. Lo realmente importante en todo proceso de transformación es conocer, darnos cuenta de la situación en la que se encuentra la empresa, de cuáles son sus necesidades y de las palancas que activarán su desarrollo y mejora continua.
¿Eso supone, entonces, implicar a toda la organización?
Los procesos de cambio, de transformación, van más de personas, de trabajar la cultura de la organización que de la propia tecnología. En toda transformación el gran reto se encuentra en ser capaces de traccionar, de tirar de las personas, de los equipos que componen la organización. De conseguir una estructura organizacional que permita una robusta gestión diaria de la empresa.
Por tanto, se necesita a una dirección que lo vea claro y sea punta de lanza.
En todo cambio relevante o con impacto en la empresa la dirección debe estar alienada y servir de ejemplo. Será muy difícil que un proceso de transformación llegue a buen puerto o siga adelante si la dirección no rema en ese sentido. Si los responsables empujan hacia el cambio, los proyectos de transformación acabarán funcionando.
Usted participa como ponente en las jornadas que organiza el Clúster de la Construcción de Extremadura y la Fundación Pymecon sobre “Gestión del cambio para la digitalización y herramientas clave en el sector de la construcción”. ¿Qué nuevas oportunidades se abren para esta actividad en la región, teniendo en cuenta que la mayoría de las empresas son precisamente pymes?
El sector de la construcción es muy amplio y cuenta con muy distintos actores. Hay empresas con un extraordinario nivel de digitalización, mientras que a otras aún les queda un importante camino por recorrer. En cualquier caso, es un sector con muchas oportunidades y un gran potencial. El hecho de que el mayor porcentaje del sector en Extremadura esté compuesto por pymes supone un activo para afrontar y acometer el cambio, ya que este tipo de empresas es más flexible y está predispuesta a transformarse. La baza está en orientarlas, en mostrarles el camino a seguir. Y para ello hay que profundizar en cuáles son sus modelos de negocio, en cómo son sus procesos y qué nivel de capacitación e implicación tienen las personas.
¿Qué aporta un encuentro como éste para abordar un proceso que, a priori, parece complejo, lo que puede llevar a que haya empresas que duden y no se atrevan a dar el paso?
Estas jornadas son importantes por dos motivos fundamentales. Más que por las herramientas tecnológicas concretas, porque sirven para visibilizar y acercar a las pymes una evolución que se está produciendo en prácticamente todos los sectores, y para que puedan conocer casos de éxito que ya se están aplicando. La cuestión no está en que todas las empresas tengan que implementar todo dentro de sus organizaciones. La clave está en qué puedo hacer para mejorar en función de mi modelo de negocio y mis necesidades concretas. En esta jornada del Clúster de la Construcción de Extremadura y la Fundación Pymecon hablaremos de cómo automatizar procesos, de cómo gestionar el día a día de modo digital, de la importancia de los datos. En definitiva, de lo que supone el Business Intelligence para el negocio.
¿Podría concretarnos cómo se realiza el trabajo de la mano de una empresa que apuesta por crecer y fortalecerse? ¿Cuáles serían las fases?
Precisamente una de las principales clave la acaba de apuntar: todo proceso se desarrolla por fases. Es un trabajo lógico que se realiza poco a poco. Lo relevante para las empresas es buscar ayuda y acompañamiento experto. La primera fase es bastante ágil y consiste en un análisis o diagnóstico para identificar las principales líneas de actuación. Algo que puede estar en dos o tres semanas. A continuación vendría la elaboración del Plan de Transformación Digital como tal, priorizando bien las herramientas que realmente son necesarias en función de las necesidades de cada empresa. Se establece una secuenciación de cada paso a dar y comienza la ejecución real. Lo bueno es hacerlo por medio de pequeñas pruebas de concepto, que van validando las mejores herramientas a implantar. Es un esquema muy habitual en procesos de automatización de empresas productivas.
¿Y cuál es la aportación de Kaizen Institute a todo este proceso?
Como especialistas en mejora continua e innovación, ofrecemos asesoría, consultoría y acompañamiento a las empresas y organizaciones durante toda la fase de diseño y definición del Plan de Transformación, así como en la elección de las mejores herramientas tecnológicas en cada caso. Y, desde el punto de vista de la implantación tecnológica, llevamos a cabo la Gestión de Actividades de Producción en Planta, lo que en Kaizen denominamos MES, además de contar con expertos en analítica avanzada. Pero, vuelvo a incidir, que lo diferencial se encuentra en cuestionarnos nuestros procesos para establecer medidas de mejora. Los procesos de digitalización no pueden convertirse en procesos de desperdicio tecnológico por no ajustarlos bien a las necesidades y modelos de negocio concretos.